El pasado martes y miércoles comenzamos en nuestros grupos de
escritura creativa de adultos la segunda sesión. Enmarcada en el retrato y el autorretrato abordamos algunos aspectos de esta técnica narrativa y estudiamos ejemplos clásicos como los autorretratos de
Miguel de Cervantes (en
Novelas ejemplares) y el famosos 'Retrato' de
Antonio Machado (en
Campos de Castilla). Como modelo de retrato analizamos el de
Madame Bovary (
Gustave Flaubert) por su riqueza, plasticidad y vigencia.
Madame Bovary es una mujer demasiado hermosa para cualquier hombre. Tiene una belleza especial, nada convencional. Su carácter varía con mucha frecuencia: a veces es una mujer muy educada, refinada, culta... Pero en otros momentos su carácter cambia: es caprichosa, ingenua e inmadura. Siempre busca la aventura, algo que le falta en su vida porque su matrimonio es aburrido. Por eso siempre está buscando una vida distinta: llena de placer, lujos y excesos. No es muy cariñosa y muchas veces se presenta con una gran melancolía.
Este breve texto nos ha dado para reflexionar sobre el estilo, la técnica y el lenguaje.
¿Qué léxico utiliza? ¿Es sencilla la redacción? ¿Es trascendente que Flaubert describa a Bovary en presente? ¿Sigue este personaje vigente en nuestra época o es un simple estereotipo desfasado? ¿Cómo sería la Madame Bovary del siglo XXI?
La tarea que debían realizar durante la semana consistía en pensar cómo sería este personaje a la luz del siglo XXI si Flaubert hubiera tenido que enfrentarse a una revisión de su clásico. Quienes no hubiesen leído la novela tenían la opción de continuar el retrato de esta singular protagonista y añadir más datos sobre el mismo. Sinceramente, ambas propuestas han sido muy enriquecedoras y estoy sorprendida con la calidad literaria de los textos de Conchi Gómez Serrano, Josefina Arias, Ana Eugenia Venegas y Ana Sosa Díaz.
En los próximos días espero compartirlos con todos vosotros.
